El ahorro como una obligación:
Una buena manera de ahorra dinero, y más que efectiva, es colocar al ahorro como una cuenta más que pagar. Al momento de recibir los honorarios por el trabajo, y en el instante en que uno hace el balance de lo disponible para gastar y las deudas que cumplir, separar una parte mensualmente destinado a ser atesorado es una excelente idea.
Esta metodología entra como complemento (o variante, según el caso) del ahorro pequeño diario que apuntamos hace un par de días. La constancia y la regularidad de este sistema termina por mentalizarnos que ese dinero ?no se debe? gastar bajo ninguna circunstancia, por lo cual al momento de llegar las fiestas siguientes uno cuenta con un depósito personal que, con suerte, hacen olvidar los problemas de regalos y demás gastos.
Planificar gastos:
Ahorrar es no gastar parte de nuestro dinero. Normalmente nuestras compras son, en parte, manipuladas por las cadenas de supermercados y grandes almacenes. Los colores, los envases, la posición de los productos y la presentación son factores que influyen en nuestras compras diarias sin que nos demos cuenta.
Cuando vamos a comprar nos dejamos llevar por la publicidad de ciertos productos, y metemos en nuestra cesta productos que no necesitamos realmente. Por eso, una buena manera de ahorrar es planificar la compra diaria. Saber qué vamos a cocinar de antemano o qué necesitamos en la casa nos ayuda a ahorrar.
Revisar lo que tenemos en casa y hacer una lista para llevar al supermercado puede ser un buen punto de inicio para empezar a no gastar sin motivo. En esto, las compras semanales son un punto negativo, ya que normalmente es donde se gasta más innecesariamente. Un truco para ahorrar es comprar según necesitemos algo.
Y si nos referimos a la planificación de grandes compras, como puede ser una cámara de fotos o un nuevo ordenador, siempre es bueno realizar una lista de lo que queremos, anotar el precio aproximado y comprobar si realmente lo necesitamos, o si solo nos dejamos llevar por impulsos.
En estos tiempos, un papel y un bolígrafo son nuestros mejores aliados para ahorrar.
Abandonar los vicios para no gastar:
Una de las mejores maneras de ahorrar dinero es no gastarlo en cosas que además son perjudiciales para nuestra salud. Por eso, la conjunción de ahorro con cuidado de nuestro cuerpo puede ser un estímulo compartido que a la larga trae más de una buena noticia.
Existen muchas maneras de combinar estos dos objetivos, aunque el más común y mejor para nosotros a corto y largo plazo es el intento de abandonar los vicios como el cigarrillo y atesorar el dinero. ¿Cómo? Juntando los billetes que iban destinado a los paquetes al día. De esta manera, a corto plazo verán que cuidar la salud ayuda a llevar un mejor nivel de vida, pero también a controlar de otra manera la economía familiar.
Cada vez que tengamos el dinero de las cajetillas, lo ideal es guardarlo en algún lugar seguro. Al cabo de diez días, por ejemplo, verán que habrá un dinero extra que antes no existía en nuestro bolsillo, para poder disfrutarlo mejor o, en todo caso, continuar con el ahorro.
fuente:articulosinformativos.com.mx